“LA DIETA SOUTH BEACH”

   Admito que “La dieta South Beach” me sacó de mi “zona de confort” como lectora,  pues si mi memoria no me falla es la primera vez que leo un libro de este tipo, es decir, uno dedicado exclusivamente a una dieta; y, es que aunque no era ni es mi intención iniciar un régimen, cuando vi este ejemplar en una venta de garaje recordé que fue todo un éxito... y la curiosidad me ganó.

   En fin, les cuento que el libro se divide en dos partes: en la primera, el autor nos explica, entre otras cosas, la razón por la que desarrolló la dieta, la forma en que repercuten en nuestro organismo los productos que consumimos y, obviamente, cómo funciona su plan; asimismo, incluye testimonios de varias personas que consiguieron perder peso y mejorar su salud a través de este régimen, aunque llama la atención que también habla sobre los motivos por los que hay gente que fracasa al seguirlo, algo que me pareció bastante útil, pues es bien sabido que cambiar los hábitos alimenticios no suele ser tarea fácil. Por otro lado, la segunda parte se compone de los planes dietéticos que se recomiendan durante las tres fases en las que se divide la dieta y de recetas acordes a ella, literalmente, ingredientes, modo de preparación e información nutricional.

   De acuerdo a lo que pude comprender con mis escasos conocimientos de nutrición, esta dieta tiene como principal objetivo mejorar la salud -especialmente la cardíaca- al tiempo que ayuda a las personas a bajar de peso; es un plan alimenticio que limita los carbohidratos en favor de las proteínas y grasas saludables sin que ello signifique tener que pasar hambre, pesar las porciones, contar calorías o dejar de disfrutar de una comida en un restaurante, ya que uno de sus objetivos es que quienes lo siguen no sientan que están comenzando una dieta, sino un nuevo estilo de vida en el que basta considerar unas cuantas reglas básicas para poder mantener los resultados a largo plazo; y, pese a que desde mi punto de vista sí se necesita fuerza de voluntad, salvo la primera parte que es la más estricta, no parece uno de esos planes que exigen demasiados sacrificios, pero eso sí, yo que estoy acostumbrada a que mi comida fuerte sea la de la tarde, creo que en este caso las cenas son más contundentes.

   Lógicamente, “La dieta South Beach” resulta más atractiva para los lectores que desean perder peso, sin embargo, aunque estoy segura de que no volveré a leer tantas recetas en tan poco tiempo y reconozco que tardé más de lo previsto en terminar el libro, la realidad es que su contenido podría ser valioso incluso para quienes están conformes con su peso y estado de salud, pues resalta la importancia de elegir correctamente lo que comemos e incluye varias recetas de reconocidos chefs.

   Ahora, ya para cerrar, quisiera agregar que si bien este título presenta un régimen alimenticio con todo detalle, antes de hacer cualquier cambio lo mejor siempre será consultar a un especialista. 

 

Título: “La dieta South Beach”

Autor: Dr. Arthur Agatston

Editorial: Rodale